lunes, 3 de abril de 2017


“Arquitectónicamente, el foramen del cráneo humano, o del templo hecho por el hombre, corresponde al lucernario, chimenea, o claraboya de la casa tradicional; y en algunos templos Occidentales antiguos e incluso relativamente modernos, este oculus del domo todavía sigue siendo una ventana circular abierta, y, por consiguiente, la estructura sigue siendo hypaethral -quedando al aire libre-. En los antiguos domos indios de madera, la abertura de arriba está aparentemente cerrada por la clave de bóveda circular” (Coomaraswamy).

No hay comentarios:

Publicar un comentario

L a caligrafía arábiga tuvo su origen como comunicación entre los hombres y Dios; y Dios quiso comunicarse con sus fieles escogiendo a un ho...